Una alimentación apropiada ayuda a que el cerebro funcione correctamente, ya que puede aumentar las capacidades intelectuales y cognitivas, además de la memoria, según diversos estudios.
Estamos hablando de
una dieta basada en alimentos ecológicos, que incluya cereales integrales, legumbres, frutos secos, semillas, frutas y verduras. También tenemos que ingerir suficientes proteínas y evitar o reducir os azúcares y los alimentos refinados.
Carbohidratos
Evitar los altibajos de glucosa y mantener un nivel estable en la sangre es esencial para tener una mente clara, ya que las bajadas de azúcar producen ofuscamiento mental, cansancio, pérdida de memoria…
Para conseguir esta energía constante y estable, la mejor opción son los carbohidratos de absorción lenta (que el cuerpo transforma en glucosa de manera progresiva).
Incluye en tu dieta cereales completos (arroz, mijo, centeno, avena, trigo, maíz y quinoa) y reduce al máximo la ingesta de azúcar refinado y de alimentos con un elevado índice glucémico como dulces, bollería industrial, etc.
Ácidos grasos esenciales
El cerebro está formado en un 60% por grasas, algunas de las cuales (omega-3 y 6) son
esenciales para conseguir el máximo rendimiento intelectual, favorecer la memoria, mejorar el estado de ánimo y reducir la depresión, la ansiedad y la hiperactividad.
Un cerebro sano contiene entre un 20 y un 25% de fosfolípidos, las grasas inteligentes del cerebro, ya que favorecen la transmisión de señales nerviosas.
El fosfolípido más abundante en los tejidos humanos es la lecitina, presente en el sésamo, la soja y la yema de huevo.
Además, te recomendamos el consumo de
pescado azul, de
aceites de semillas prensados en frío y de
carnes ecológicas.
Proteínas
Son imprescindibles para estimular los procesos cerebrales, así que tenemos que asegurarnos que las que tomemos sean de calidad.
Leche,
huevos, pescado,
soja,
tofu,
seitán o
tempe son buenas fuentes de proteínas.
Vitaminas y minerales
Las vitaminas y los minerales son
claves para que los procesos del metabolismo funcionen en armonía. Es importante tomar cinco raciones de
fruta y verdura cada día, un puñado de
semillas molidas y
frutos secos.